martes, 15 de mayo de 2018

Un paseo por Atenas

Un paseo por Atenas

Iniciamos nuestro último día en Atenas y Grecia, el día lo teníamos planeado realizar en un autobús panorámico y los lugares a visitar seleccionados. Ana quería comprar los últimos detalles de su lista de obsequios y entre el hotel, a la orilla del barrio de Plaka y nuestra primera visita y parada del autobús en la Puerta de Adriano compramos dichos obsequios.

A la llegada la Puerta de Adriano tuvimos que coger un taxi y regresar al hotel por indisposición de Ana, estuvimos con ella hasta que se recuperó pero se encontraba cansada y quería descansar. Cuando ya se encontraba bien me animó a que fuera a visitar la ciudad y le hice caso. Arantza y yo nos pusimos en camino y la visita la haríamos a pie.


El emperador Adriano construyó este precioso arco de mármol entre lo que era la ciudad griega y la ciudad que este emperador comenzó a construir con grandes obras, como la biblioteca que veremos más adelante y el templo de Zeus junto al Arco.

 
Adriano finalizó las obras del templo de Zeus en el año 132 d.c. para celebrar el festival Panhelénico.

 Nos introdujimos de nuevo en el barrio de Plaka hasta la Linterna de Lysikrates, año 334 a.c. Los atenienses esponsorizaban las obras teatrales que se ofrecían en el teatro Dionisios, por eso cuando Lysikrates recibió el premio de la esponsorización a la mejor comedia, mandó construir este precioso monumento.

 La linterna de Lysicrates construido todo ello en mármol, con seis columnas de orden corinto y encima de ellas un friso con escenas de la vida de Dionisos. Y en su parte más alta sobre hojas de acanto tallado se expone el premio recibido.

Ponemos rumbo hacia el este para bordear el monte de la Acrópolis, callejeando por las escasas calles vacías de bares y comercios, donde nos encontramos con un pequeño edificio que nos llamó la atención y

es por que fue la primera escuela en Atenas con el método de enseñanza Mutuelle (inter-teaching), desconozco que significa este método.La escuela fue fundada entre 1875-1876.

Por si alguien tiene más interés le dejo la placa conmemorativa de los 130 años de enseñanza hasta el año 2007, continuando como escuela primaria al día de hoy.

Llegamos al ágora romana, situada en un extremo del barrio Monastiraki de Atenas, donde nos recibe la Torre de los Vientos. No entramos a los recintos del ágora romana,  de la biblioteca de Adriano y al del ágora griega, cuyas fotos, tomadas desde la Acrópolis, se pueden ver en el blog de ayer.

 La Torre de los vientos, de planta octogonal y cada una de las paredes indicaba una dirección del viento marcada por una veleta movida a voluntad del Dios Eolo. Dicha torre se encuentra a la entrada del ágora romana.

 Me gustó esta casa junto al ágora romana.

Fachada oeste de la Biblioteca de Adriano, con sus columnas de estilo corintio.

El tren del Pireo a Atenas entre restos arqueológicos a la altura del ágora griega.

Vista de los propileos de la Acrópolis, la columna de Adriano y el templo de Atenea Niké.

Nos introducimos por callejas del barrio Monastiraki.

Que nos conducen hasta la Plaza Monastiraki

Puesto callejero de frutas.

Plaza Monastiraki con la estación de tren y metro a la derecha y la mezquita Tzistarakis a la izquierda.
Avanzamos por la calle  Atenas hacia la Plaza Kotzia, nos llamó la atención las flores moradas de los árboles.

Entrada al mercado central de Atenas, la zona de carne y pollo expuestas en estas vitrinas. Las carnes eran de cerdo, cordero y pollo principalmente y algún puesto de carne de ternera. Las cabezas de cordero son muy apreciadas. No me gusta sacar fotos de los mercados si no están realmente asépticos. En un patio interior estaba la zona del pescado. Puestos de verduras y frutas no había, seguro que se venderán en algún otro mercado, por que las consumen mucho.

 Había que sentarse y probar un magnífico café de esta casa.

Este es el servicio para un café solo y un cortado. Cuando te sientas el camarero viene con dos vasos grandes de agua para pedirte la comanda, con los cafés nos trajo un vaso pequeño de seltz y la leche era para el cortado.

El café griego se prepara manteniendo caliente el café molido en esa especie de cacito de latón dentro de las arenas calientes, para servirlo le ponen agua caliente y tú te lo viertes en tú taza se toma sin filtrarlo. Es parecido al café turco, la dominación otomana dejó muchas costumbres turcas.

Ayuntamiento de Atenas en la Plaza Kotzia.

Continuaremos andando hasta la Plaza Omonoia para tomar la Avenida Panepestiniou (de las universidades) que nos conducirá hasta la Plaza Sintagma donde está el Parlamento y la Tumba al Soldado desconocido.

En el camino nos encontramos con edificios singulares como este del Cinema Rex, edificio de estilo Art Deco de la década de los años 30. La fachada recuerda a la de los rascacielos de Nueva York. Tenía un cine a la altura de la calle, un teatro en el primero y en el sótano un cine infantil. En 1982 el edificio sufre graves daños por un incendio y hoy día bajo la tutela del Ministerio de Cultura acoge escenarios del Teatro Nacional.


Otro edificio que me llama la atención por mantener la fachada y permitir que sea está la que brille frente al edificio que lo construyen en la parte de atrás.

Y llegamos a nuestro objetivo de esta avenida y era visitar el conjunto arquitectónico compuesto por tres edificios templo de la cultura: La Biblioteca nacional, la Universidad y la Academia de Bellas Artes. Obras de los hermanos daneses Christian y Teophilus Hansen. Ana me había pedido expresamente que le hiciera un buen reportaje de este conjunto arquitectónico.

La Biblioteca Nacional de Atenas es un edificio neoclásico diseñado por Teophilus Hansen entre los años 1.887 y 1.902. Destaca de su estructura y en su fachada una galería de seis columnas dóricas. La estatua  existente entre las dos escalinatas es en honor de P. Valianos, mecenas de esta construcción.

A la derecha de la Biblioteca, mirándola de frente, se encuentran la Universidad y la Academia de Bellas Artes al fondo.

La sede central de la Universidad de Atenas es el primero de los tres edificios que se comenzó a construir en 1837 y se finalizó en 1864 y fue diseñado por Christian Von Hansen.

A lo largo de toda la fachada principal está pintado un friso con escenas sobre el conocimiento, esta escena pertenece a la zona central. Encima de la cabeza del personaje sentado está escrito Odona (camino) rodeado de las musas que le asesoraran, con una palabra escrita sobre su cabeza que indican a que rama de la sabiduría representan.

Artesonado del atrio de entrada.

El camino siempre te sorprende, como este olivo de más de ochocientos años.

La academia de Bellas Artes fue construida entre los años 1859 y 1887 obra de Teophilus Hansen y es de los tres edificios el que presenta un mejor estilo neoclásico griego.

La entrada está franqueada por cuatro estatuas las más bajas son Platón y Sócrates y en las dos altas columnas jónicas están Atenea y Apolo.

Dejamos atrás esta bella explanada de la cultura para dirigirnos a la Plaza Sintagma sede del Parlamento Griego a cuyos pies está el monumento al Soldado Desconocido custodiado por soldados griegos con un uniforme

Ya estamos frente al Parlamento, son las 15:50 minutos y la gente se acerca para ver el cambio de guardia. frente al Monumento al Soldado Desconocido. El relevo se produce cada hora en punto, las 24 horas al día.

Estos soldados son conocidos como evzones, un cuerpo de soldados creado en la primera mitad del S. XIX. El color de su uniforme y la indumentaria es variado.

 Permanecen prácticamente inmóviles la hora que dura su turno de guardia. De su gorro rojo cuelga una especie de larga cola de caballo.

 
 El relevo se está produciendo.

 Los pasos los inician con movimientos muy marcados con la pierna derecha, acabando con un golpe sonoro en el suelo, para ello llevan una especie de herradura en las suelas de sus zapatos.


 Sus movimientos están perfectamente sincronizados,

 Tomando su posición.

 Continuamente les colocan al milímetro su vestuario, su posición y

la del fusil.

De vuelta al hotel te llama la atención un globo rojo atado con una cadena y la descripción me sorprende "Monumento al artista desconocido".

Se nos acaba el viaje y que mejor despedida que subir a la terraza del hotel a disfrutar durante unos minutos del Partenon iluminado.


A pesar de los problemas de salud que nos han afectado, hemos aprendido cosas de Grecia al ver sus extensos campos de cítricos, naranjas y limones, de olivos con sus apreciadas olivas y aceite todo ello en el Peloponeso, también sabemos que tienen zonas de vinos como las de Nemea, en el Peloponeso, con excelentes vinos blancos secos y un buque afrutado como el del Little ARK, con un arca de Noé pintada. La gente en general ha sido agradable, han hecho por comprendernos y que les comprendiéramos. Hemos aprendido del orgullo de sus tradiciones, que varias veces nos han ofrendado con sus dulces típicos a la hora del postre, como la Halva que es un bizcocho hecho con sémola y emborrachado con almíbar. De la gratuidad de las entradas a los parques arqueológicos a las personas con discapacidad, también tenemos que denunciar la inexistencia de facilidades sobre el pavimento de las ciudades para que estas personas puedan desenvolverse con facilidad.


Las ruinas arqueológicas, la luz del Mar Egeo reflejándose en sus islas y la temperatura alrededor de los 26ºC nos han hecho disfrutar de unos días en una Grecia Poli Orea (muy bonita).


lunes, 14 de mayo de 2018

Atenas, su Museo Arqueológico y la Acropolis.

Atenas, su Museo Arqueológico y la Acrópolis.

Hemos reservado los tres últimos días para visitar y disfrutar de Atenas. Como estimamos llegar al hotel sobre las once de la mañana hemos planeado realizar la primera visita al Museo Arqueológico y al día siguiente  visitar la Acrópolis y el tercer día recorrer la ciudad.

 La foto del Partenon como presentación indiscutible de Atenas.

Pero nuestra primera visita de Atenas fue para el Museo Arqueológico, imprescindible para conocer los hitos más importantes de la cultura griega.

Comenzamos con las primeras muestras de cerámicas del neolítico para encontrarnos inmediatamente con parte del tesoro de Atreo como es la máscara de Agamenón.

Máscara de Agamenón del Tesoro de Atreo en la antigua ciudad de Micenas, del S.XVI a.c.. Dos agujeros cerca de las orejas indican que estuvo sobre la cara de un hombre sujeta con un cordel. (Fue imposible evitar los reflejos de la luz, al estar protegida por cristales).

 Figuras de cerámica de la época micénica.

Detalle de dos de ellas. Parece como si hubieran sido fuente de inspiración de artistas modernos contemporáneos.

 Balanza de bronce del S.XV a.c.

Escultura en bronce del año 140 a.c. de un caballo a galope conducido por un joven jinete, que presenta en su cara pasión y dolor. En su mano izquierda mantenía las riendas y 

en su mano derecha mantendría la fusta.

Estatua de Hermes en mármol, de la época de Augusto entre los años 27 a. y 14 d.c. En su mano izquierda lleva un "caduceo" símbolo del comercio.

Volvemos a encontrarnos con el Templo de Asklepeio, dios de la medicina, en Epidaurus. Figuras que formaban el frontón de la entrada oeste al templo.

y las tres figuras que culminaban el frontón anterior del templo Asklepeio.

Figura de Poseidón en mármol, su mano derecho está posicionada como si hubiera tenido cogido el tridente, años 125 al 100 a.c..

Figura en bronce de Zeus o Poseidón, la controversia sigue aunque parezca que en su mano derecha hubiera existido una jabalina y no un tridente. La figura del año 480 a.c. muestra una exquisita representación del movimiento y de la anatomía.

Estatua de un kouro (joven). Sus articulaciones están en plena potencia
Parte dorsal de la misma estatua.

Precioso busto en mármol de un filosofo, Metrodoros de Lampsakos discípulo de Epicurus.
Este busto es una copia realizada en el periodo de Adriano (años 117 al 138 a.c,) del busto original de la época Helenística (años 280 al 250 a.c.).

No calculamos bien el tiempo y tras tres horas en el museo decidimos no subir a ver la planta primera donde se halla la cerámica y regresamos al hotel a descansar. Por la noche, entramos en una taberna al lado del hotel y cenamos en un ambiente local cerdo asado, berenjenas rellenas con un sofrito de carne y tomate y pastiserie con un vino blanco de garrafa durito. No acertamos.

Al día siguiente nos acercamos a la Acrópolis, Ana entró gratis por su discapacidad junto a un acompañante, e iniciamos el ascenso poco a poco hasta la parte superior, el objetivo era llegar al Parternón y enfrente en el Erecteion ver las Cariátides y lo conseguimos. Abrimos la banqueta plegable y se sentó para disfrutar de su sueño.

Las fotos fueron tomadas en dos días y a horas diferentes, por que había tanta gente que nuestra amiga y yo decidimos volver a las ocho en punto de la mañana. Fue un acierto para disfrutar viéndolo de nuevo y tomar fotografías sin gente.

 El primer día bordeamos la Puerta Beule (S.Ia.c.) para visitar

el Odeón Romano.

Regresamos al camino que abre la Puerta Beule y que atraviesa los Propileos (que tenían la función de pórtico y vestíbulos) a la Acrópolis o ciudad en alto. A la izquierda el pedestal donde estuvo una estatua de Agripa (S.I a.c.) y a la derecha el templo de Atenea Niké. La foto está tomada a las ocho y pocos minutos de la mañana y el sol enfrente.

Ascendemos hacia los propileos y miramos a la derecha para ver el templo de estilo jónico, y fue construido en el siglo v a. C. para conmemorar la victoria sobre los persas.


 Templo de Atenea Niké.

 Nos cruzamos con los soldados que han estado custodiando la Acrópolis y nos dejan el lugar para disfrutarlo.

La parte este de los propileos que dan a la zona interior de la Acrópolis.

 Ya estamos frente al lado oeste del templo, de estilo dórico, con ocho columnas a los frentes y dieciséis en los laterales. A pesar de estar con trabajos de restauración, me impresiona su belleza, su grandiosidad y la serenidad que me transmite, ahora sin el bullicio del día anterior.

 Iniciamos su vuelta por el lado sur, donde se conserva una de las 92 metopas que cubrían el friso del entablamento, que describían la guerra con Troya y las luchas contra las amazonas y los centauros.

 Metopa que muestra la lucha contra un centauro.

 A la izquierda la cara sur del templo y enfrente la cara este.

 
Fachada del lado este.

 Parte del frontón y metopas del friso del entablamento.

 Desde la cara sur de la Acrópolis podemos ver las ruinas del teatro de Dionisios.

Continuamos hacia el este de la Acrópolis donde existe un mirador para ver la Acrópolis y hacia el exterior vemos


 La puerta de Adriano, al final de la calle y el templo de Zeus.

 y el barrio de Plaka, que ha quedado como una isla entre la Acrópolis y la moderna ciudad de Atenas.

 Abandonamos el mirador y nos dirigimos hacia la zona norte de la Acrópolis, donde se ubica el Erecteion, construido entre los años 421 y 395 a.c.. Templo de estilo Jónico.

 Preciosa fachada este de séis columnas jónicas.
 En su lado sur está la tribuna de las cariátides, que son copias de las originales, pero que llenan completamente su espacio. Las originales están una en Londres y el resto en el museo arqueológico de la Acrópolis.

 en un principio vestían joyas y sus pliegues en los vestidos y recogidos en las manos muestran naturalidad.

 La construcción de este Templo tenía una gran complejidad por su gran desnivel.

 Precioso pórticoen el lado norte del templo, con seis columnas Jónicas , con un artesonado de piedras y

 un bello portal de piedra.
 El olivo sagrado de Atenea, no permitía realizar un templo al uso, de ahí que abriera un pórtico en el lado norte.
 Una última foto del Erecteion y las Carótidas, tras el lugar donde estaba el antiguo templo de Atenea.

 Me acerco un instante al lado sur y oeste de la Acrópolis para fotografiar la fachada del templo de Atenea Niké, las barreras de paso no te permiten sacar una foto completa del pórtico.

 Entramos en los propileos para abandonar la Acrópolis.

Detalle de los propileos.

 Giro alrededor de la columna de Adriano para fotografiar los límites de la zona noroeste de la Acrópolis donde se hallan los restos de la biblioteca de Adriano y

y el antiguo ágora griego.

Abandonamos la Acrópolis con una sensación de haber disfrutado de ella y por ello nos damos la vuelta para sacar nuestra última foto.

 A la izquierda parte del Odeón Romano, los propileos con el templo de Atenea Niké y el pórtico oeste y sur del Paternón.

 Es aconsejable entrar a las ocho de la mañana, son las nueve y veinte de la mañana y la calle de acceso a la Acrópolis ya está repleta de autobuses.

Unos buenos cafés para desayunar y el Café au lait, ¡¡¡Chapeau!!! La cantidad de café pesado y molido delante de ti, azúcar a tu gusto, miel disuelta en el agua caliente y volcada sobre el filtro del café, le añaden la leche y a disfrutarlo.